PECADOS CAPITALES - luxuria

Caminaba como cada dia... un dia mas despierto, un dia mas de trabajo, un dia mas de cansancio, un dia mas de... de lo mismo, por variar.
No era precisamente el mes mas caluroso del año, mediaba octubre y caminaba por Aragon, rumbo a sur, creo que esa era la unica referencia de calor en todo el panorama de ese dia... de repente un recuerdo cruzo por su cabeza, estaba ella, de nuevo, alli, tan presente, tan impabida, tan doliente, tan hermosa como la noche anterior, recordaba el rozar de su piel, el aroma de su cuerpo, su humedo hedor, sus labios rozando cada parte de su cuerpo, incluso las que desconocia que existian... sin embargo fue solo una noche, un poco de alcohol, algo mas de hierva y la combinacion se hizo justo para que terminaran en algo parecido a un cama... el aun la recordaba, y con el avanzar de cada uno de los pasos que le llevaba mas al sur ese recuerdo se hacia mas cristalino. Sin embargo no hubo un telefono, un nombre ni una direccion, solo el encuentro de amantes cautivos de la noche, aunque... el aun la recordaba.

De repente por obra del destino, de la suerte, del azar o solo de la vida que pone en el camino menos sospechado a los mas oscuros deseos, la vio cruzando la calle... el aun la recordaba, y ella era tal y como la tenia en su mente, incluso era mas; mas alta, mas morena, con la piel de ambar, con el cabello largo, con los labios turqueza que aun parecia tener tatuados por todo su cuerpo. La vio y sin mediar palabra avanzo furtivamente, sin que ella lo pudiese ver, se acerco sigilozamente, y cuando por fin estuvo tan cerca como para poder sentir su aroma, para no poder casi contener el deseo de llevarla y hacerla suya, se dijo a si mismo: le deseo...
Ella se percato de su presencia, abrio de par en par sus hermosos ojos miel, le recorrio de arriba a abajo como si intentera recordar cada segundo que habian pasando juntos y luego mirando al cielo exclamo: "Mierda!!!, no lo queria ver nunca mas en mi vida!"